Estos folletos no solo presentan mensajes cristianos, sino que también incluyen recursos visuales y escritos adaptados a las lenguas y culturas locales. "Es vital que las personas entiendan el mensaje en su propio idioma", agregó otro miembro del equipo.
El proyecto no solo busca la evangelización, sino también el fortalecimiento de comunidades a través de la educación y el desarrollo espiritual. Las iglesias locales han jugado un papel fundamental en la distribución y en el seguimiento con las familias que reciben estos materiales.
El impacto ya es visible en algunas regiones. Muchas comunidades han comenzado a reunirse regularmente para estudiar los folletos y discutir temas espirituales. Esto fomenta un sentido de comunidad y pertenencia.
"El Evangelio tiene el poder de transformar vidas, incluso en los lugares más remotos", expresó uno de los líderes del proyecto. Esta declaración refleja el compromiso de los organizadores de llegar a cada rincón de Perú con su mensaje.
Este esfuerzo ha sido posible gracias a donaciones internacionales y al compromiso de voluntarios. Según la fuente, más misiones de este tipo están previstas para los próximos meses, lo que podría beneficiar aún más regiones del país.