En 2022, la Corte Constitucional de Colombia despenalizó el aborto hasta las 24 semanas de gestación, un fallo que generó una gran polarización en la sociedad. Ahora, con el creciente apoyo de sectores conservadores, la bancada provida busca frenar lo que consideran una amenaza para los valores familiares.

La bancada provida presentó en septiembre el proyecto de ley “Escucha su Latido”, cuyo propósito es que las mujeres que deseen abortar escuchen el latido del corazón del bebé por medio de un ultrasonido.

Sin embargo, la propuesta de la bancada ha sido recibida con críticas por parte de grupos feministas y defensores de los derechos humanos, quienes argumentan que este tipo de legislación viola los derechos de las mujeres a decidir sobre su propio cuerpo. “El Estado no puede imponer una moralidad única sobre las decisiones privadas de las mujeres”, señaló un activista de la organización feminista Mesa por la Vida.

En la exposición de motivos de su proyecto de ley, los congresistas provida explican que se busca “concientizar acerca del valor de la vida de los seres humanos sin importar la etapa de desarrollo biológico en la que se encuentren”.

Representantes de La Mesa Por La Vida han presentado otros proyectos, como el que pretende asegurar la objeción de conciencia para el personal de salud, presentado esta semana, y el de adopción desde el vientre, introducido en 2021 y posteriormente archivado. Además, miembros de la bancada provida han impulsado dos proyectos para que la Constitución reconozca la vida 'desde el momento de la concepción', lo que implicaría la prohibición del aborto. Aunque estas iniciativas fueron rechazadas, las volvieron a presentar en agosto.

“Es habitual que en el Congreso haya debates en torno a los derechos sexuales y reproductivos porque son temas que suelen tener réditos electorales”, dijo a El País Laura Castro, coordinadora de la Mesa por la Vida y la Salud de las Mujeres, un colectivo feminista y defensor del aborto.

Como informó Diario Cristiano, a mediados de agosto pasado la Superintendencia de Salud en Colombia emitió una resolución en la que reglamenta el acceso 'sin obstáculos' y da instrucciones para acceder a la “Interrupción Voluntaria del Embarazo para mujeres (niñas, adolescentes y adultas)”. De esta manera, la Corte Constitucional implementaría una nueva normativa que haría legal el aborto hasta la semana 24.

Interrupción Voluntaria del Embarazo es el eufemismo utilizado por los Gobiernos y organizaciones progresistas para referirse al aborto.

En ese momento, el congresista conservador, Luis Miguel López, aseguró que en Colombia no existe ninguna ley que garantice el aborto: “A punta de sentencias y de extralimitaciones de funciones, no se puede usurpar el papel que le pertenece al Congreso de la República”.

La Confederación Evangélica de Colombia (CEDECOL) publicó una 'Carta Abierta en defensa de la vida y los valores cristianos', en la que manifiesta su apoyo a las expresiones de la bancada provida del Congreso.

Por su parte, la feminista Castro afirma que, “ha sido una constante que los movimientos anti derechos utilicen alianzas que tienen con congresistas para mover sus agendas políticas”,

A pesar de las divisiones, la bancada provida cuenta con el apoyo de los líderes cristianos, quienes ven esta cruzada como un esfuerzo para proteger los valores y principios en la sociedad colombiana. El debate continúa siendo uno de los más álgidos en la agenda legislativa.